Expo de originales de "Le Bathyscaphe"



Si se encuentran en Zaragoza del 2 al 28 de Marzo de 2012, podrán ver una exposición de las ilustraciones originales que realicé para el libro "Le Bathyscaphe" (Édition Éveil et Découvertes, 2011), en la librería zaragozana El Armadillo ilustrado (C/ Las Armas, 74).

Además de las ilustraciones que hice para el cuento, hay una ilustración inédita con un montaje bastante especial. Pero lo mejor es que lo vena por ustedes mismos.
El horario de la librería es de Lunes a Sábado de 9:30 a 13:30 y de 16:30 a 20:30.

La presentación de la exposición tendrá lugar el Miércoles 4 a las 19:30 horas.

La librería y la editorial están haciendo lo posible por poder traer ejemplares del libro (en francés) bajo pedido y los originales expuestos estarán a la venta. Y el montaje de los cuadros a corrido a cargo de Cuadros Atlántida.

Le Bathyscaphe es un cuento infantil que trata de una manera muy sutil el tema de la agorafobia. Y lo hace a través de la historia de Nemo, un niño que vive encerrado en su batiscafo en el fondo del mar, de donde recoge objetos provenientes del "mundo exterior" que tanto miedo le da. Pero su vida cambiará para siempre, cuando, a través de su periscopio, conoce a una niña.

Sepa más de este cuento pulsando aquí

Espero que vayan a visitarla y que la disfruten.

12 Lunas 2012: Primavera

Ilustración para el folleto y el cartel de 12 Lunas, Primavera 2012.


Hace ya unos días que en Zaragoza tenemos un tiempo espléndido (demasiado espléndido, diría yo). Y ya se nota que a la gente le apetece salir a la calle y hacer cosas; como el "Urban Picnic" que se celebró hace varios Domingos en la calle Las Armas.
Y por supuesto comienza, un año más la campaña de ocio nocturno para jóvenes del Ayto. de Zaragoza, 12 Lunas.
En esta ocasión, y a petición del cliente, el tema de la imagen de Primavera es el arte urbano y el break-dance. Y ahí tenemos a un joven artista callejero haciendo espectaculares piruetas en la plaza de la Seo de Zaragoza mientras una joven pinta sobre el suelo.
Lo cierto es que me llevó mucho tiempo terminar esta ilustración, pero creo que ha merecido la pena.
Espero que les guste.

Versiones: Arzack, Harzach, Arzach, Harzack...

Mi visión de Arzack, mi personaje favorito de Moebius, tras su muerte.


El pasado Sábado 10 de marzo me desperté con la noticia de que el maestro Jean Giraud, "Moebius" había fallecido en un hospital de París a los 73 años y tras una larga enfermedad.
No voy a hacer una biografía ni ningún perfil del que está considerado dios del cómic. No es a mi a quién corresponde hacerlo y además creo que ya estarán aburridos de sendos reportajes de su persona.
Voy a hablar de lo que Moebius significaba para mi.

Conocí al maestro titánico en mi segundo Salón del cómic de Barcelona a mediados de los 90. Tenía, yo, 18 añicos y estrenaba mi pase de prensa con el que podía acceder a lugares donde sólo podría encontrar a periodistas, editores y autores de cómic. Estaba dando vueltas como un pirulo, más perdido que un pulpo en un garaje cuando de repente me tropecé con ÉL. Estaba firmando a un par de periodistas y esperé mi turno para hablar con él, no podía dejar escapar semejante oportunidad de conocer en persona a alguien que había admirado desde tantos años.
Cuando terminó con los periodistas de verdad dirigió su atención hacia mi (y aquí viene la anécdota ridícula). Yo le enseñé mi pase de prensa para que viese que ese crío, que tenía delante, tenia razón de estar allí y que quería entrevistarle. Moebius debía de estar tan empanado por el propio Saló que cogió mi pase y me lo firmó. Con mi francés de andar por casa le aclaré que quería hacerle una entrevista. Para mi sorpresa, él accedió y nos fuimos al stand de su editorial para buscar un horario y a un traductor. De camino hablamos de tonterías y me di cuenta de que era un hombre que rezumaba genialidad y que era muy amable y atento. ¿Por qué ese titán iba a tomarse tantas molestias con un periodista aficionado de tan corta edad? Pero allí estaba, prestándome toda su atención y acompañándome para concertar una entrevista.
La entrevista no pudo ser. Los responsables de la editorial no tuvieron tanta amabilidad conmigo y me dijeron que no tendría tiempo para mi. Moebius me pidió disculpas y nos despedimos.
Y ya está. Esos fueron los 10 minutos en los que coincidí con Moebius. No es una gran historia, pero es lo que hay.
Y eso es lo que puedo decir de Moebius, aparte de su genialidad, que era muy amable.

Admiraba su trabajo desde que leí El garaje hermético con unos 13 años. Y siempre procuré seguir su obra. Lo admiraba, sobretodo, como fundador de Los humanoides asociados, por crear, junto a varios camaradas, un punto de inflexión en el mundo del cómic y un universo de historias y autores que me influyeron muchísimo.

Tras el paso de Moebius a otro plano existencial superior, ojeo mis ejemplares de la revista Metal Hurlant como el que se pone a ver fotos antiguas.
El mundo de la cultura se ha quedado huérfano sin el maestro Moebius.